Las autoridades anunciaron que contabilizan 402 muertes por las inclemencias del tiempo que destrozaron al menos dos localidades con inundaciones, deslaves, desbordamientos de ríos y derrumbes.
Asimismo, desafortunadamente aún esperan encontrar más fallecidos, por lo que subirá el conteo de víctimas, conforme avance el trabajo de voluntarios y la Cruz Roja.
“Tenemos una gran necesidad de ayuda de las autoridades y la gente. Este desastre es realmente grave”, subrayó el administrador Thomas Bakenga de la zona de Kalehe.
Es de mencionar que durante la noche del 2 al 3 de mayo, al menos 131 personas murieron por las fuertes lluvias en Ruanda, país vecino del Congo.